El Discípulo Decimotercero (Spanish)

Oct 18, 2013 3313

Tell-Them-SpanishLa historia de como Jesús curó al hombre poseído por demonios en la tierra del Gadarenos es realmente impresionante por muchos motivos. Usted encuentra la historia en el quinto capitulo de el evangelio de Marcos

Es impresionante porque pasó después de que Jesús había calmado la tormenta en el Mar de Galilee. Jesús tiene todo el poder sobre las tormentas de la naturaleza y las tormentas en las vidas de los seres humanos.

¡Es impresionante porque este hombre probablemente no era ni judío, él no era limpio segun la ley judia, no era rico, él no estaba totalmente sano de la mente, y ni aun estaba vestido! No era nada. Era la última persona en la tierra que merecia ser el recipiente de la gracia inmensurable de Dios. Este milagro habría absolutamente horrorizado absolutamente a los discípulos y toda la gente que había seguido a Jesús a través del lago en los barcos esa noche.

Es impresionante porque muestra el poder del Señor Verdadero sobre una legión de demonios. Incluso ellos son obligados a reconocerlo como el Señor de Todo. ¿Por qué deberíamos tener miedo nosotros?

Es impresionante porque cuando los vecinos vienen para ver lo que pasa, encuentran este hombre que habla con Jesús, totalmente vestido y en su mente derecha.

Es impresionante porque este hombre es usted y este hombre soy yo y este hombre somos todos nosotros, sin Cristo. Y este hombre es todos nosotros, con Cristo. Antes y después.

Pero la cosa más impresionante de esta historia es su final. Al final de esta historia este hombre que ruega a Jesús dejarle subir en el barco con Jesús, de modo que él pueda hacerse su discípulo, y seguirlo a todas partes. Él pide que Jesús le deje ser su decimotercer discípulo.

Pero Jesús le dice no. Le dice, “cuéntales todo lo que el Señor te ha hecho, y cómo ha tenido compasión de ti.” (Marcos 5:19).

Y este hombre hizo lo que Jesús le pidio. El versiculo 20 dice que “ El hombre se fue, y comenzó a contar por los pueblos de Decápolis lo que Jesús había hecho por él; y todos se quedaron admirados. Las Diez Ciudades no eran judías. Eran ciudades de los Gentiles.

Jesús tenía una gran trabajo aun por hacer con los doce discípulos. Ellos no estaban listos. Tenían muchos prejuicios para vencer antes de que ellos estuvieran listos para ir a las naciones y compartir las noticias buenas. Les tomó mucho tiempo aun después de la resurrección antes de que ellos estuvieran listos. Tenían mucho que debian desaprender y much por aprender.

Pero este hombre si estaba listo. Él no sabía tanto como los otros doce, y el no lo necesitaba, porque tenía una historia para contar, y la conto. En todas partes donde él pasó por estas ciudades de Gentil les dijo lo que Jesús había hecho por él y como Jesús le había mostrado misericordia. En el evangelio de Marcos él es el primer misionero a los Gentiles.

Este hombre fue el decimotercer discípulo. Él camino delante de los otros doce. Él fue un modelo de como el evangelio de Jesucristo seria compartido con las naciones, y de como las noticias buenas de la salvación llegarian a todo el mundo.

Y así es como a partir del principio, el cristianismo ha crecido, por medio de personas que ha estado dispuestas a contar su historia. Los discípulos de Jesús no tienen ninguna excusa. El cristianismo no es un club secreto. Si usted ha tenido un encuentro con Jesús, usted siempre tiene una historia para contar, sea tan humildo o tan gloriosa su historia. Y Jesús le dice a Ud,  “cuéntales todo lo que el Señor te ha hecho, y cómo ha tenido compasión de ti.”

Este hombre estaba delante de su tiempo, pero ahora el tiempo ha venido. Jesús quiere que usted sea su decimotercer discípulo. Cuente su historia. Asi es como el evangelio es predicado. Asi es como el reino crece. Esto es lo mas minimo que podemos hacer por Aquel quien nos ha dado libertad.

Usted puede contar su historia mismo aquí en nuestro grupo de Facebook, y asi comenzar.

Buenas Noticias Sin Limite necesita sus historias. El Señor Jesús necesita que Ud sa su decimotercer discipulo.

Eliezer Gonzalez

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